Muchos -no todos- diseñadores de interfaz de usuario comienzan con una formación en diseño, añadiendo después los conocimientos técnicos necesarios para trabajar en la interfaz de usuario. Otros comienzan en un papel de programación o desarrollo antes de añadir la teoría del diseño y las habilidades de investigación a sus conocimientos técnicos. Pero entonces, ¿Qué habilidades necesito para ser UI Designer exactamente? Te lo contamos.

¿Cuáles son las habilidades esenciales para el diseño de la interfaz de usuario?

Convertirse en diseñador de interfaz de usuario requiere desarrollar una mezcla de habilidades duras (técnicas) y blandas (transferibles). Echemos un vistazo para conocer mejor estas habilidades que necesitarás para ser un UI designer:

Habilidades duras

Para empezar a desarrollar los conocimientos técnicos que necesita un UI designer, deberás centrarte en la creación de esquemas y prototipos, en el diseño adaptativo y en herramientas ampliamente utilizadas en el sector, como Sketch e InVision, para dar vida a los diseños.

También hay ciertas habilidades que son específicas del diseño de interfaz de usuario, como los principios del diseño de interacción -la forma en que los usuarios navegan e interactúan con los flujos de información-, así como la comprensión de los modelos de investigación y pruebas de usuarios, y cómo crear y utilizar personas como guía para la planificación del diseño.

Por último, tendrás que construir una sólida base de conocimientos de diseño, incluidos los principios básicos de diseño como la marca, la tipografía y la teoría del color, y cómo desarrollar y utilizar guías de estilo.

Habilidades blandas

Un UI Designer de éxito también se basa en algunas habilidades blandas. Dado el entorno de colaboración en el que tiene lugar el desarrollo, la capacidad de trabajar bien como parte de un equipo es un activo obvio. También lo son las habilidades de comunicación. Los diseñadores de interfaz de usuario tienen que comunicarse no sólo con sus compañeros de trabajo, sino que también se les pide con frecuencia que interactúen con personas ajenas al equipo, por ejemplo, solicitando opiniones de grupos de usuarios de prueba o haciendo presentaciones a las partes interesadas.

Quizá la habilidad más difícil de alcanzar, y la más exclusiva de los diseñadores de interfaz de usuario y de experiencia de usuario, es la necesidad de comprender intuitivamente cómo piensan otras personas. Podrías llamarlo «empatía»; lo que se reduce a un claro sentido de cómo funciona la mente, y especialmente qué estrategias de diseño se traducirán en un producto de éxito. La abreviatura podría ser, cómo utilizar tu intuición para desarrollar una interfaz por la que los usuarios finales puedan navegar sin siquiera pensar en ello, utilizando su intuición.

Aquí entran en juego la disposición, el color, la tipografía y otros elementos de diseño. Hacer que parezcan atractivos es sólo la mitad de la batalla; la otra mitad es anticipar cómo responderán los usuarios a ellos, y luego desplegar estos elementos para lograr la reacción deseada del usuario. Para ampliar la metáfora del viaje del usuario: un diseñador de UX dibuja los cimientos del edificio y planifica el recorrido por él de la A a la Z, mientras que el diseñador de UI decide dónde estarán las ventanas y las puertas, crea las señales de orientación y elige dónde colocarlas.